Un nuevo y controvertido estudio divulgado el lunes en una revista médica estadounidense podría reavivar el debate sobre la seguridad del uso de flúor en el agua consumida, ya que vincula los niveles más altos de exposición a un menor coeficiente intelectual en niños.
Publicado en la prestigiosa revista Journal of the American Medical Association (JAMA) Pediatrics, generó rechazo de algunos científicos que critican los métodos del estudio, defienden los beneficios dentales demostrados del mineral y advierten que los hallazgos pueden no aplicarse directamente a los niveles típicos de fluoración del agua en Estados Unidos.
Un nuevo y controvertido estudio divulgado el lunes en una revista médica estadounidense podría reavivar el debate sobre la seguridad del uso de flúor en el agua consumida, ya que vincula los niveles más altos de exposición a un menor coeficiente intelectual en niños.
Publicado en la prestigiosa revista Journal of the American Medical Association (JAMA) Pediatrics, generó rechazo de algunos científicos que critican los métodos del estudio, defienden los beneficios dentales demostrados del mineral y advierten que los hallazgos pueden no aplicarse directamente a los niveles típicos de fluoración del agua en Estados Unidos.
Investigadores del Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental (NIEHS, por su sigla en inglés) revisaron 74 estudios sobre la exposición al flúor y el coeficiente intelectual de niños realizados en 10 países, incluidos Canadá, China e India.
Los mismos científicos ayudaron a formular una recomendación oficial del gobierno en agosto de que existe una «confianza moderada» en que los niveles más altos de flúor se relacionan con puntuaciones más bajas de coeficiente intelectual (CI).
Ahora, el equipo dirigido por Kyla Taylor señaló a la AFP que el nuevo análisis encontró una «asociación estadísticamente significativa» entre la exposición al flúor y puntuaciones reducidas de CI.