La tenista australiana asegura que no tiene ni «impulso físico» ni «ganas emocionales» para seguir compitiendo en la élite
La australiana Ashleigh Barty, número uno del mundo, ha anunciado que se retira del tenis profesional con tan solo 25 años. La noticia ha cogido a contrapié al mundo del deporte, pues la jugadora había ganado a principios de enero el Open de Australia, convirtiéndose de esta manera en la primera tenista local en alzarse con el trofeo en los últimos 44 años.
Visiblemente emocionada, Barty se despidió durante una charla con su compatriota y también extenista Casey Dellacqua en la que aseguró estar «muy feliz y preparada. En mi corazón sé que es el momento, sé que es lo correcto. El éxito para mí es saber que he dado absolutamente todo, todo lo que puedo.
Estoy plena, estoy feliz y sé cuánto trabajo se requiere para sacar lo mejor de uno».
La deportista no profundizó en exceso en los motivos de su adiós. «Ya no tengo el impulso físico, las ganas emocionales ni todo lo que se necesita para seguir desafiándote a ti mismo en lo más alto del nivel. Estoy agotada». «También quiso brindar por los buenos momentos. El tenis me ha dado todos mis sueños y más».
Barty se retira de las pistas desde la cima. Conquistó tres Grand Slams (el ya mencionado Open de Australia, Wimbledon el año pasado y Roland Garros en 2019) además de alcanzar un 75% de victorias en los 407 partidos que ha disputado en el circuito profesional. Además, ganó una medalla de bronce en la categoría de dobles en los Juegos Olímpicos de Tokio del pasado verano.
Esta no es la primera vez que Barty se retira del tenis. Ya en 2011 y con tan solo 18 años, tras ganar el torneo juvenil de Wimbledon la australiana, una de las grandes promesas por aquel entonces, dijo estar cansada y se ausentó de las pistas durante doa años. Durante esa ausencia, juó profesionalmente al criquet en su país antes de volver a coger la raqueta.
fuente: Abc.es
