En su intento por huir de la policía, un turista estadounidense en notorio estado de ebriedad, que llevaba encima dos cuchillos, saltó por el cantil a la altura de los condominios Isla 33 con intención de esconderse en las rocas del fondo del barranco.
Minutos antes, este sujeto estaba trenzado en una riña con otro turista de origen extranjero en la colonia La Gloria, a la altura de la Casa del Waffle, ambos en visible estado inconveniente, que, alterados, se gritaban hasta de lo que se iban a morir.
A punto estaban de llegar a las manos cuando elementos de Seguridad Pública, que habían acudido por un reporte ciudadano, lograron frenar la agresión y cuando procedían a detener a los dos extranjeros, uno de ellos burló a los uniformados y emprendió graciosa huida, lo que orilló a pedir refuerzos.
Así, mientras una patrulla trasladaba a los separos a Christopher T., originario de Massachusetts, Estados Unidos, los policías pidieron el apoyo de las unidades para localizar a una persona con playera negra, short negro y zapatos tenis del mismo color.
Llamó la atención de trabajadores del complejo turístico Isla 33 una persona corriendo a toda velocidad que repentinamente desapareció de su vista en la zona del acantilado; al acercarse a mirar, observaron que el sujeto, algo aturdido, intentaba alejarse caminando entre las rocas.
Mientras aún observaban a quien posteriormente dijo llamarse Paul S.S., originario de Texas, una patrulla se acercó y uno de los empleados informó de la presencia del individuo en la playa mismo que, al ser interceptado y revisado por los policías, le encontraron encima dos cuchillos de mesa, que consideraron armas blancas.
Una vez en comandancia, tras ser detenido por alterar el orden público y posesión de armas blancas, el extranjero fue atendido por paramédicos de la empresa privada LIFE de una lesión en la ceja derecha que no ameritó mayores atenciones, quedando, al igual que la persona con quien discutía, a disposición del juez calificador.
Fuente: cambio22
