Ambos escritores señalaron la importancia de los nombres de las marcas en el comportamiento de los consumidores. En medio de una elevada contaminación de la comunicación, lo sencillo es lo potente.
Pocos años después, Naomi Klein publicó No Logo. La periodista canadiense logró infiltrarse en una fábrica de tenis Nike para obtener información sobre sus áreas de recursos humanos y publicidad. La batalla entre empresas ocurre en la mente de los consumidores, apuntó Klein.
Las investigaciones realizadas por Ries, Trout y Klein permiten comprender el mundo de las marcas, en particular las de lujo.
No es necesario describir que Rolex es una marca de relojes. La presidenta Dina Boluarte se ha encargado de modelar entre tres y cuatro relojes Rolex.
Boluarte hizo pareja presidencial con Pedro Castillo. Su partido Perú Libre es de extrema izquierda, pero durante el famoso pleito entre ellos provocó la desafiliación de Boluarte.
Castillo se fue a la cárcel y Boluarte asumió la presidencia de Perú.
Maggie May, “influencer y experta en artículos de lujo” (así la presenta el portal de noticias Cuarto Poder), explica las características de los relojes Rolex favoritos de la presidenta Dina Boluarte.
May señala que el modelo favorito de Boluarte es Datejust, oro rosa y plata combinado con diamantes de dos de los doce números.
La presidenta de Perú no esconde los Rolex. Los ha modelado en diversos eventos públicos.
El viernes pasado la policía ingresó a la casa de Boluarte en búsqueda de los Rolex. Una denuncia motivó a un juez a allanar su residencia debido a que, en sus declaraciones de la presidenta, no confiesa la posesión de los famosos Rolex.
Ayer, una nueva acusación anónima indicó que la presidenta también tiene una pulsera Cartier.
Es probable que la marca Rolex le transfiera personalidad a Boluarte. Las marcas, como los planetas, son diferentes mundos. Boluarte vive en un planeta animado por las joyas y el lujo.
La política que le heredó Pedro Castillo estaba animada por la corrupción y la simulación de un gobierno de izquierda radical.
A Castillo lo ayudó el presidente López Obrador al enviarle a un grupo de “expertos” para orientarlo en el tema económico, pero sobre todo, para defenderse de los medios de comunicación.
Boluarte decidió encerrarse en los Rolex. Aspiró a un implante de poder.
Fuente: eleconomista
