Varios hijos y políticos cercanos a Angela Merkel han expresado recientemente su descontento con el legado político de la canciller alemana, que dejará el cargo tras las elecciones del próximo mes de septiembre.
Entre los críticos más destacados se encuentra el propio hijo de Merkel, quien en una entrevista con el periódico alemán Der Spiegel, declaró que su madre había sido incapaz de dejar un impacto duradero en el país durante sus 16 años en el poder. Asimismo, el hijo de la canciller también lamentó que su madre no hubiera sido lo suficientemente valiente para afrontar los desafíos más importantes del siglo XXI, como la lucha contra el cambio climático.
Otros políticos cercanos a Merkel, como el exministro de Finanzas alemán Wolfgang Schäuble, también han expresado su decepción con el legado de la canciller, argumentando que su gobierno no había logrado abordar adecuadamente problemas clave como la inmigración y la integración de los refugiados.
No obstante, otros políticos y expertos han defendido el legado de Merkel, destacando su papel en la consolidación de la Unión Europea y su liderazgo durante la crisis financiera global de 2008.
En cualquier caso, está claro que el legado de Angela Merkel seguirá siendo objeto de debate y controversia en los años venideros, mientras que Alemania se prepara para una nueva era política tras su partida del cargo.
