La sentencia judicial que obligó al Ayuntamiento de Solidaridad a restituir una concesión por recolección de basura de 240 meses a la empresa Repsol, dejó al descubierto una trama de corrupción mucho más compleja.
De acuerdo a documentos que se dieron a conocer hoy, en la sentencia judicial en cuestión, que data del 15 de marzo, se hacía una clara alusión a que se dejaba “sin efecto todo contrato o compromiso adquirido posterior al pactado” con la empresa Redesol, como se ve en la fotografía de abajo.
Sin embargo, a pesar de que existía esa sentencia judicial, el Gobierno municipal firmó un contrato con PASA y VTM del Golfo, por un monto total de casi 49 millones de pesos, a fines del mes de junio.
Lo más extraño del caso, es que de acuerdo a diversos oficios públicos en posesión de La Opinión, el municipio ya sabía que había perdido esa sentencia, y debía restituir el contrato de Redesol.
Sin embargo, continuó con la millonaria contratación de PASA.
Tan es así, que de acuerdo a documentos oficiales que pueden verse aquí abajo, y que son públicos, desde el primer trimestre del año, el municipio ya contempló un aumento en el monto de los egresos correspondientes a “Servicios de Arrendamiento” por 59.5 millones pesos.
Lo que quiere decir que programó ese contrato cuando ya sabia que no podía hacerlo.
O sea, la trama de negligencia y corrupción es la siguiente:
El municipio conoció el 9 de enero la sentencia que le obligaba a restituir a Redesol la concesión de recolección de basura en varias zonas.
La sentencia decía que no se podía contratar a otra empresa posterior al contrato de Redesol.
El Ayuntamiento, por intermedio de su jurídico René Medrano, no combatió esa sentencia.
El Jurídico acusó que Laura Beristain le dijo que del tema se iba a encargar el súper asesor Marciano Peñaloza.
Peñaloza y Medrano dejaron que el tema se cayera, y por lo tanto la sentencia se hizo efectiva el 15 de marzo de este año.
Sin embargo, en ese mismo momento, aun cuando era ilegal, se aprobó un aumento al rubro “Servicios de Arrendamiento” por 59.5 millones de pesos, destinados a la contratación de una nueva empresa.
A fines de junio, se hizo un contrato para rentar 27 camiones de PASA y VTM del Golfo por 8 MDP por mes.
Pero el municipio ya sabia que el contrato violaba una sentencia judicial.
El pasado viernes, el Ayuntamiento realizó una sesión extraordinaria de Cabildo, para acatar la sentencia a favor de Redesol. Los regidores no sabían de qué se trataba.
La situación ahora es que Redesol tiene un contrato por 240 meses, pero está en condiciones de llegar “a un acuerdo de indemnización” (según le comunicaron al regidor opositor Orlando Muñoz, quien lo dijo en la sesión pública).
Y PASA y VTM del Golfo perderán sus contratos y seguramente irán a juicio. O también llegarán a un «acuerdo de indemnización».
O sea, el municipio perdió el juicio con Redesol, con quien deberá arreglar una indemnización, y lo mismo hará con PASA y VTM.
Ambos juicios, que costarán millones de pesos al municipio, se perdieron por ‘negligencias” de Laura Beristain, Marciano Peñaloza y René Medrano. Y los que se sumen.
Fuente: laopinionqr