Lewis Hamilton puso a la venta en noviembre de 2021 su exclusivo ático tríplex situado en el 443 de Greenwich St, en Tribeca (Manhattan), un edificio construido entre 1883 y 1884 por el arquitecto Charles Haight que en sus orígenes fue una fábrica de encuadernación de libros, pero que tras una exhaustiva remodelación se convirtió en un complejo de lujo que ha albergado a numerosos famosos como Jennifer Lawrence, Ryan Reynolds y Blake Lively o Justin Timberlake y Jessica Biel. Ahora cuenta con una nueva y famosa propietaria, Jennifer Gates quien ha puesto a la venta su apartamento de 5 millones de dólares en la Quinta Avenida para mudarse a este enclave.
El inmueble, que el piloto de Fórmula 1 compró en 2017 por 44 millones de dólares y en el que nunca llegó a vivir, se vendió por aquel entonces a un fideicomiso con sede en Seattle, pero no ha sido hasta ahora que se ha conocido que tras esta operación estaban la hija de Bill Gates y su marido, el jinete Nayel Nassar. La pareja pagó por él 51 millones de dólares (unos 48 millones de euros al cambio actual).
Este apartamento, que cuenta con ascensor propio, es el más grande de todo el complejo y ofrece, en sus tres plantas, 826 metros de espacio habitable y 315 metros cuadrados de espacio al aire libre. Cuenta con seis dormitorios, seis cuartos de baño y dos tocadores. La habitación principal dispone, además, de su propio vestidor, de un pequeño bar y de una sala de estar con chimenea de gas.
También hay una cocina gourmet con una gran isla y electrodomésticos de alta gama y una sala de estar en esquina de doble altura con vigas de madera vistas y techos de 6 metros de alto. Por su parte, el nivel superior cuenta con paredes de vidrio de suelo a techo que dan acceso a la terraza en la que hay una piscina, una cocina exterior y zona de comedor en la que organizar comidas y cenas con familia y amigos y en la que disfrutar de las mejores vistas de la zona. La propiedad también incluye dos de las quince plazas de garaje que ofrece el edificio.
El complejo residencial, en pleno centro de Nueva York, ofrece también a sus residentes una piscina cubierta de 21 metros, un hammam turco, un gimnasio con sala de vapor, sala de juegos para niños y una terraza comunitaria, así como servicio de conserjería las 24 horas.
