Se habla poco de la validación emocional para lo importante que es en el ser humano. Entre los malestares que se tratan en consulta, la ansiedad y la depresión están a la cabeza, pero la psicóloga sanitaria experta en trauma Lidia Asensi asegura que la validación emocional es muy recurrente y hay que tratarla para evitar problemas a futuro.
La validación emocional es aceptar la propia experiencia emocional o la de otra persona. «Sin rechazar, sin restarle importancia, ni negar lo que uno mismo u otro están sintiendo», dice la experta. Por tanto, implica no juzgar y empatizar con las emociones que se están sintiendo, generadas por un acontecimiento o suceso.
«Cuando contamos algo que nos ha ocurrido y cómo nos ha hecho sentir ese suceso, hay personas que intentan resolver la situación quitando la emoción que nos genera lo que nos ha sucedido: ‘no es para tanto’, ‘seguro que se arregla’, ‘no lo pienses’.», expone la psicóloga.
La validación emocional nos permite sentir que la otra persona nos entiende y por tanto, sentir un espacio donde poder expresar nuestras emociones con libertad, sin sentir un juicio de valor, y sin intentar cambiar lo que uno mismo u otra persona están sintiendo.
¿Cómo podría una persona regular sus emociones si cree que todos sus sentimientos están mal? Esta visión negativa puede llevar a una persona a estados depresivos o ansiosos. Sin embargo, validar las propias emociones y sentimientos puede desarrollar un sentido de uno mismo y de identidad. Comprender las propias emociones ayuda a una persona a gestionarlas de forma más eficaz.
Para qué sirve la validación emocional
La validación comienza con uno mismo. Para abordar esto hay que comprender la experiencia interna, así como las acciones y comportamientos. Las personas a menudo luchan por cómo se sienten, juzgándose a sí mismas por cómo viven situaciones y eventos y en numerosas ocasiones una persona prefiere ignorar cómo se siente.
A través de la validación emocional hacemos saber al otro que sus emociones son validas y comprendidas por nosotros así como la nuestra propia.
– Sirve para normalizar lo que se está sintiendo y entender que está bien sentir emociones agradables y desagradables.
– Nos permite entender que la reacción emocional que tenemos ante determinado suceso o contexto tiene sentido y es acorde a lo sucedido.
– Permite crear un vinculo de confianza e intimidad entre dos o más personas.
– Nos permite ser conscientes de la experiencia vivida.
La validación emocional es importante porque hace que las personas nos sintamos comprendidas y valoradas, además fortalece nuestras relaciones con los demás.
Cómo validar a una persona y a mí mismo
El acto de identificar lo que estás sintiendo puede resultar confuso; por lo tanto, es posible que debas preguntarte qué desencadenó el sentimiento en primer lugar.
También es importante tener en cuenta que para validar a alguien no significa tener que estar de acuerdo con su reacción si no entender que, dada su experiencia de vida, es valido que experimente esa emoción.
La forma de validar a una persona es, según Lidia Asensi:
– Ponerse en el lugar del otro, empatizar.
– Escuchar lo que la persona siente.
– Aceptar lo que la persona está sintiendo y experimentando, sin juicio.
– No eliminar o minimizar la emoción que la otra persona siente.
En cambio, si no nos autovalidamos ni lo hacemos con los demás, se genera inseguridad y dudas en la persona con respecto a lo que siente: «Podemos sentir que no encajamos en nuestro entorno, ya que sentimos que no nos entienden. Nos hacemos responsables de la situación: ‘soy yo el que está erróneo por sentirme así’, en lugar de ver que es la otra persona la que quizás está minimizando aquello que estoy sintiendo».
Según Lidia Asensi, «cuando damos con personas que no nos validan nuestras emociones, solemos tomar distancia con estas». Es decir, dejamos de compartir nuestra información al no sentirnos entendidos. La invalidación emocional por parte de ciertas personas puede generarnos ciertas dudas sobre si lo que sentimos es acorde o, por el contrario, estamos siendo exagerados.
Hay que tener en cuenta que muchas veces vamos a encontrarnos con personas que no saben gestionar emociones. Por lo tanto, su objetivo va a ser retirar la emoción en lugar de empatizar y acompañar en nuestra emoción. En ese momento sentiremos que nuestras emociones molestan o incomodan.¿Está relacionada la búsqueda de aprobación con la búsqueda de validación? Al parecer, sí. Preocuparse continuamente por lo que piensan los demás es similar a buscar la validación de los demás. Esto puede impedirle vivir su vida, una con propósito y metas, así como valores en los que se cree. La necesidad de aprobación y la búsqueda de impresionar a los demás pueden alejarlo de quien es. Buscar ser validado puede tener las mismas cualidades. Es mejor tener una idea sana de quién eres, ya que estarás menos inclinado a buscar aprobación y validación en otra parte.