El Gobierno mexicano extraditó el jueves a Estados Unidos a Ismael Zambada Imperial —hijo del gran capo mexicano de la droga considerado líder el cartel de Sinaloa, Ismael El Mayo Zambada— para enfrentar un juicio por tráfico de drogas. Zambada Imperial, conocido como El Mayito Gordo, fue entregado a las autoridades estadounidenses por funcionarios de la Fiscalía General de la República (FGR) y el viernes compareció ante un juez del Distrito Sur de California.
Zambada Imperial, de 35 años, fue capturado en 2014 en una comunidad del municipio de Culiacán, en el Estado mexicano de Sinaloa —localizado en la costa del Pacífico mexicano—, cuando transportaba armas de alto calibre. El narcotraficante fue condenado a 10 años de prisión acusado de violentar las leyes mexicanas relacionadas a la posesión de este tipo de armamento, reservado para el uso exclusivo del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea mexicana.
La Agencia Antidrogas estadounidense advirtió de que era buscado por cargos relacionados al tráfico de cocaína, metanfetaminas, marihuana y otras sustancias ilegales en Estados Unidos. El diario mexicano Reforma informó el sábado de que Zambada Imperial desarrolló sus actividades ilícitas en territorio estadounidense entre 2005 y 2014 con apoyo de su padre, su hermano Ismael Zambada Sicairos, conocido como El Mayito Flaco, y junto a Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán, el despiadado líder del cartel de Sinaloa, condenado en julio por un juez de Nueva York a cadena perpetua por narcotráfico, más 30 años de prisión por violencia con armas y 20 por blanqueo de dinero. La extradición de Zambada Imperial se hizo con sigilo de parte de las autoridades mexicanas, que no informaron oficialmente del hecho. El narcotraficante compadeció el viernes ante el juez Michael S. Berg, de la Corte Federal del Distrito Sur de California, en San Diego.
La captura de El Mayito Gordo es un golpe para el cártel que controla su padre, uno de los hombres más buscados por las autoridades mexicanas y estadounidenses. El Mayo era socio y compadre de El Chapo y es considerado el hombre fuerte del sangriento cartel de Sinaloa. Durante 50 años ha sabido burlar a las autoridades, que en octubre de 2008 capturaron a su hermano, Jesús Zambada García, considerado uno de los cuatro cabecillas del cartel del Pacífico. Zambada García, también conocido como Reynaldo Zambada o rey Zambada, fue señalado en su momento por la Fiscalía General de México de encargarse de la actividad criminal del cartel en el Valle de México y de la importación de cocaína de Colombia y de los precursores necesarios para producir metanfetaminas. Además, controlaba las operaciones de los estados costeros del Pacífico, en el centro y sur del país. Cinco años después de su captura fue extraditado a Estados Unidos. Zambada García participó en el operativo que permitió escapar a El Chapo en su primera fuga del penal de Puente Grande, una prisión de máxima seguridad en el Estado de Jalisco (México). “Conseguí un lugar para que aterrizara el helicóptero para rescatarlo”, contó ante el jurado en noviembre de 2018 durante el juicio contra El Chapo.
La extradición de Zambada Imperial se da una semana después de que las autoridades estadounidenses detuvieran a Genaro García Luna, el máximo jefe de la policía mexicana durante el Gobierno de Felipe Calderón y gran estratega de la lucha contra el narcotráfico iniciada durante la Administración del expresidente mexicano. García Luna está acusado por la misma corte de Nueva York que sentenció a Joaquín El Chapo Guzmán de colaborar con el cartel de Sinaloa durante los años de la guerra contra las drogas que emprendió el entonces presidente mexicano tras su llegada al poder. El hermano de Ismael El Mayo Zambada, Jesús El Rey Zambada, socio de Guzmán en Sinaloa, declaró en una audiencia en febrero del año pasado que su corporación había hecho pagos millonarios a García Luna al menos en dos ocasiones.
Fuente: elpaís
