De acuerdo con la organización no gubernamental Reinserta, en México 30 mil niñas y niños han perdido su infancia por su incursión en la delincuencia y el crimen organizado.
Como ejemplo, la asociación difundió la historia de un menor que dejó su pasión por el beisbol por una pistola. Esa liberación de adrenalina al batear la cambió por armas y delitos.
A los 8 años lo llevaron a robar y tuvo que dejar el guante, el casco y su bate para llevar una navaja en el pantalón y desde los 10 años estuvo expuesto a la fabricación de droga y a la violencia.
A los 12 años no recibió el guante y la pelota con la que soñaba; a su corta edad su padre le regaló una pistola y fue entonces que perdió su inocencia.
A los 15 años fue detenido por ser parte de un negocio familiar dedicado al narcomenudeo.
“En poco tiempo, vivió toda una vida; tuvo que crecer para complacer. Se le arrebataron los sueños de la infancia, los días de inocencia y ahora, también se cortaban sus años de descubrimiento, de forjamiento de identidad, de añoranzas y primeros pasos para definir el camino de su vida. Un día eres niño, al otro eres parte de la delincuencia organizada”, advierte Reinserta.
La organización señala que, de acuerdo al Estudio de Factores de Riesgo y Victimización en Adolescentes que Cometieron Delitos de Alto Impacto Social en México siete de cada 10 niños tuvieron contacto con un grupo delictivo de la zona en la que habitan.
El estudio realizado por Reinserta también señala que sólo el 26 por ciento de las personas adolescentes concluyó su educación básica previo a la reclusión; uno de cada cuatro adolescentes padeció hambre y dos de cada tres adolescentes tuvieron acceso a un arma de fuego en su comunidad.
En el marco del Día del Niño, Reinserta hizo un llamado para que los tres órdenes de gobierno se enfoque en crear políticas públicas focalizadas en la niñez y adolescencia para prevenir que niñas y niños sean despojados de su infancia.
Fuente: POR ESTO!
