Venta de terrenos en la Ruta de los Cenotes propicia la contaminación: Experto

El doctor Lorenzo Álvarez aseguró que la venta de terrenos en la Ruta de los Cenotes en Puerto Morelos representa un riesgo ambiental y de salud

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La venta indiscriminada de terrenos en la llamada Ruta de Los Cenotes en el municipio de Puerto Morelos, representa un riesgo ambiental y de salud, advirtió el doctor Lorenzo Álvarez Filipi, investigador de la UNAM.

El también académico del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, dijo que la zona que atraviesa la carretera que va de Puerto Morelos a Leona Vicario es sumamente frágil, ya que contiene el principal reservorio de agua de la región.

Explicó que adquirir un lote en la zona para vivir o realizar cualquier actividad humana requiere de abrir pozos y fosas sépticas, cuyos desechos caen al manto freático, de donde sacan agua para el consumo humano.

Pero no sólo se queda ahí, sino que corre por los ríos subterráneos hasta desembocar en el mar y finalmente termina sobre los corales de la barrera arrecifal, señaló.

“La compra venta de terrenos en esa área está plagada de irregularidades, desde el hecho de que es una zona de conservación sin servicios públicos y la ley no permite transacciones en estas circunstancias”, dijo.

Indicó que la venta de terrenos también entraña una fuerte especulación y falta de certidumbre en la propiedad de la tierra, ya que al tratarse de zona ejidal no se puede hablar de propiedad privada.

“Lo que hacen los ejidos es vender grandes extensiones a desarrolladoras a las que transfieren derechos, las cuales a su vez las fraccionan y se las venden a las personas a precios mucho más altos, con la promesa de la regularización”.

Indicó que debe haber una regulación sumamente estricta en esta zona por parte de los tres niveles de gobierno; tanto en el tema de la protección ambiental, como en el de dar certidumbre en la tenencia de la tierra.

En este sentido, Roberto Rojo, investigador y buzo experto en cenotes y ríos subterráneos, miembro del Circulo Espeleológico del Mayab, recomendó la urgencia de crear un Reglamento Municipal de Cenotes y Cavernas.

“En Solidaridad y Tulum ya existe, después de muchos años se logró consolidarlo y que fuera aprobado; con este instrumento es más fácil la protección de estos ecosistemas”, subrayó.

Actualmente el municipio de Puerto Morelos opera aún con el Plan de Desarrollo Urbano (PDU) y Plan de Ordenamiento Ecológico Local (POEL) del municipio de Benito Juárez, que data del 2014.

De acuerdo al POEL, la Ruta de los Cenotes se enmarca dentro de las Unidades de Gestión Ambiental (UGA) 11, 09-A y 09-B, la primera en el Ejido de Puerto Morelos y las otras dos en el Ejido de Leona Vicario.

LasUGAs, estipulan una política de conservación y reconocen riesgo de afectación por Incendios Forestales y Cambios de Uso de Suelo no autorizados (apertura no autorizada de caminos).

Así como la necesidad de diversificación de las actividades económicas productivas ambientalmente amigables,ausencia de iniciativas de diversificación turística en la zona de los cenotes y hacia Central Vallarta.

Al respecto Tirso Esquivel, director de Ecología y Desarrollo Urbano, dijo que el 1 de julio ElConsejoMunicipal de Ordenamiento Territorial, Ecológico y Desarrollo Urbano, inició los trabajados para conformar el PDU y el POEL.

Dijo que se presentaron los contenidos a elaborar en los programas de Desarrollo Urbano de Centros de Población y los métodos de participación ciudadana.

“En total se harán cuatro instrumentos, uno municipal que abarcará hasta las zonas de POEL y Milla de Oro, y otros por cada centro de población: Puerto Morelos, Central Vallarta y Leona Vicario”, precisó.

Indicó que actualmente Desarrollo Urbano sólo otorga permisos en la Ruta de los Cenotes a quienes respeten lo que marca el POEL, que en algunos casos son cuatro viviendas por hectárea, en otros dos, partiendo de la carretera a un kilómetro por cada lado.

“Estamos trabajando en un programa municipal que regule el crecimiento que se ha dado en la zona y permita una planeación efectiva, acorde a la realidad y políticas ambientales que se definan”, subrayó.

En la zona, es la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) la que encarga de vigilar el cumplimiento del cuidado del acuífero; fue en 2017 la ultima vez que la dependencia clausuró obras en torno a un cenote por desmonte con maquinaria.

Fuente: POR ESTO!

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