Los más de tres siglos de presencia española en Filipinas dejaron un monumental patrimonio histórico, entre el que destaca la primera universidad de Asia, una fuerte devoción católica, los nombres propios y miles de palabras.
Pero, al contrario que en América Latina, no dejaron la lengua, ya que el castellano fue desplazado por el inglés durante las décadas posteriores a la independencia en 1898, sobre todo tras la II Guerra Mundial.
Incluso después de la época colonial, el español fue lengua cooficial en Filipinas, junto al tagalo y al inglés, hasta la Constitución de 1987. Durante las primeras décadas del siglo XX.