La salud mental se ha vuelto una prioridad para las generaciones actuales, algo que no ocurría con las personas pertenecientes a ‘los niños de la posguerra’, que van de 1930 a 1948, o con los ‘Baby Boomer’, que nacieron entre el año 1949 y 1968. Sin embargo, ahora la salud física y mental son muy importantes, y cada vez más las personas consideran indispensables la ayuda terapéutica.
Sin embargo una de las preguntas que más se hacen es ¿cuál es la terapia que necesito para sanar mis problemas emocionales?, desconocen la variedad de tratamientos psicológicos que hay en la actualidad y cómo pueden ayudarlos a trabajar temas muy específicos.
Las 5 terapias psicológicas más efectivas: ¿cómo elegir la que es mejor para mí?
En la psicología existen varios tipos de terapias, cada una con enfoques y técnicas muy específicas. A continuación se detallan cinco de las más comunes y que pueden ayudarte a superar algunos conflictos emocionales como la ansiedad, la depresión, la dependencia, los celos, el control, entre otros.
Terapia Cognitivo-Conductual (TCC):
Este tipo de terapia se enfoca en identificar y cambiar los patrones de pensamiento o comportamientos negativos y nada saludables. El objetivo es ayudar a las personas a desarrollar habilidades para afrontar y resolver sus problemas emocionales. Es una de las terapias más breves. Los profesionales que se dedican a ella procuran brindar herramientas muy prácticas para que los pacientes, que a veces llaman «clientes», dejen atrás viejas prácticas que no los hace sentir bien. Por ejemplo este tipo de terapia te puede ayudar con problemas de ansiedad, el control, la dependencia o los celos en tus relaciones de pareja. Suelen ser tratamientos breves, de no más de un año.
Psicoanálisis o psicoterapia Psicoanalítica:
Entre el psicoanálisis y la psicoterapia psicoanalítica hay una diferencia casi imperceptible en cuanto al método, la cual consiste en que en la primera se busca más la independencia en las sesiones, mientras que en la segunda el analista podrá ser más directivo, pero en ambas se exploran las experiencias pasadas de las personas para entender y resolver conflictos emocionales subyacentes. Sobre todo se enfoca en la exploración de los procesos mentales inconscientes. En ella se trabaja con la asociación libre, la interpretación de los sueños, los mecanismos de defensa que van surgiendo en el propio tratamiento, así como la transferencia, fenómeno en el que las emociones inconscientes que se generaron con figuras importantes del pasado ahora se proyectan en la relación con el terapeuta. Este tipo de terapia ayudará a aquellas personas que desean comprender con mayor profundidad por qué siempre tienen el mismo tipo de parejas, ciertas obsesiones o temores, así como el origen sus trastornos. Suele ser de los tratamientos más largos, puede durar de uno a cinco años.
Terapia Gestalt:
Esta terapia a diferencia del psicoanálisis, se concentra en el aquí y el ahora. Para los profesionales que se dedican a ella es fundamental que los pacientes tomen conciencia del momento presente y se hagan responsables de sus pensamientos, creencias, emociones y comportamientos, para lograr su bienestar y crecimiento personal. El objetivo es que logren comprender por qué responden de cierta manera a alguna situación. Asimismo, se enfocan en integrar los aspectos fragmentados de la personalidad para lograr un mayor autoconocimiento. Los terapeutas también buscarán alentar a los individuos a prestar atención a lo que están experimentando en la actualidad y dejar atrás eventos pasados o futuros que puedan generar angustia. Esta terapia te puede ayudar a encontrarle un sentido a tu presente, problemas para socializar o a mejorar tu autoestima. Puede durar más de un año, depende de cada persona.
Terapia Familiar:
En este tipo de terapia se busca que participen todos los integrantes de la familia, para examinar y abordar los problemas desde una perspectiva sistémica, considerando las dinámicas que generan problemas y que se establecieron consciente e inconscientemente entre todos los miembros. El objetivo es mejorar la comunicación y las dinámicas al interior. El rol del terapeuta será mucho más directivo y sugerirá estrategias para la resolución de conflictos. Suele ser breve, puede durar entre seis meses o un año, dependiendo de los problemas que se deseen trabajar.
Terapia de Pareja:
Como su nombre lo indica se centra en resolver conflictos y mejorar la comunicación dentro de las relaciones de pareja. El objetivo principal es fortalecer la conexión emocional y resolver problemas interpersonales como la infidelidad, la rutina, los problemas de comunicación o en la intimidad, así como dinámicas destructivas, desequilibrios en las responsabilidades del hogar, la falta de empatía entre los miembros de la pareja, entre muchos otros temas. Puede durar alrededor de un año.
Estos son solo algunos de los enfoques terapéuticos a los que puedes recurrir en caso de necesitar apoyo emocional en estos momentos, Es importante tener en cuenta que la elección de la terapia dependerá de la naturaleza específica de tus problemas y preferencias.
Fuente: heraldodemexico