El documental «Framing Britney Spears» y la derrota del padre de la artista en los tribunales han provocado una reacción en cadena: los medios reconocen sus excesos por lograr audiencia y muchos, como Justin Timberlake, se disculpan por la misoginia con que la juzgaron.
La guerra financiero-legal entre Jamie Spears y su hija, Britney ha dado paso a una oleada de arrepentimiento por parte de muchos de los implicados en el tratamiento de este caso. ¿Ha habido una doble moral a la hora de informar sobre los problemas mentales de la artista? ¿Es la misoginia responsable de una visión sesgada y cruel en el «juicio mediático» que ha recibido a lo largo de estos años?
Fuente: ABC