Los tres consejos de Bill Gates para tener una vida feliz y exitosa

El magnate empresarial y fundador de Microsoft cuenta algunos hábitos y pensamientos que le han ayudado a ser mejor a lo largo de su vida

0
197

Las figuras que han destacado a lo largo de la historia de la humanidad son, a menudo, referentes para muchas personas. Sus métodos de trabajo, sus hábitos en la vida diaria o los logros que alcanzaron, sirven de motivación e inspiración.

Así es como puede suceder, por ejemplo, con el magnate Bill Gates. Figura empresarial, desarrollador de software, inversor, autor y filántropo estadounidense, fue fundador de Microsoft junto a su amigo de la infancia Paul Allen, convitiéndose en uno de los softwares más utilizados en todo el mundo.

Haber producido y gestionado el nacimiento y desarrollo de una de las mayores empresas tecnológicas del mundo hizo que Bill Gates tuviese que aprender diferentes trucos de productividad y aprovechamiento del tiempo, además de conocer bien las formas de que el trabajo no influya demasiado a la vida personal.

Como él mismo ha reconocido en algunas ocasiones, para tener una vida más plena y feliz se ha visto advocado a ir adquiriendo hábitos concretos a lo largo de su carrera. Parte de ellos han surgido a base de vivir errores o han venido de consejos de sus amigos y seres queridos. Aunque no siempre los cumplió, sí reconoce que le aportaron valor. Te contamos cuáles son:

La pregunta es más importante que la solución

Solucionar un problema o una cuestión es importante dentro de una gran empresa, pero para Gates, había algo más crucial: saber qué preguntar. Hacernos las preguntas correctas ante una situación complicada puede ayudarnos a encontrar las respuestas más acertadas. Además, hace una reflexión sobre qué preguntarnos, relacionandolo con la experiencia de otros, tal como publicó en su página web en 2020.

«Desde que era adolescente, he abordado cada gran problema nuevo de la misma manera: comenzando con dos preguntas. Utilicé esta técnica en Microsoft y todavía la uso hoy. Hago estas preguntas literalmente todas las semanas sobre Covid-19». Estas cuestiones eran: ¿Quién ha afrontado bien este problema con anterioridad? ¿Y qué podemos aprender de ellos?

Controlar el tiempo

En los primeros años de Microsoft, Gates reconoce que no aprovechaba demasiado bien el tiempo, pasando horas y horas programando y desarrollando diferentes elementos para la empresa. Esto dejó de ocurrir cuando su amigo Warren Buffet, magnate de las inversiones, le dijo: «La diferencia entre las personas exitosas y las personas realmente exitosas es que las personas realmente exitosas dicen ‘no’ a casi todo».

Así, ambos reflexionaron sobre la gestión del tiempo, y Gates contaba: «El hecho de que sea tan cuidadoso con el tiempo, tiene días en los que no hay nada en [su agenda]… sentarse y pensar puede ser una prioridad mucho mayor. No es un indicador de tu seriedad el hecho de que hayas ocupado cada minuto de tu agenda». Con este pensamiento, podemos aplicarlo de modo que sepamos priorizar las tareas y desechar aquellas cosas que nos quitan tiempo y verdaderamente no nos aportan o no podemos conseguir llevarlas a cabo correctamente.

Será mejor hacer un par de cosas bien usando el tiempo necesario que intentar hacer muchas a la vez y que al final ninguna salga como debería.

La paciencia es la clave para la motivación

La temprana edad a la que Gates fundó Microsoft junto a Paul Allen, sus nociones sobre cómo dirigir una empresa y, sobre todo, a sus empleados, eran escasas o prácticamente nulas. Esto provocó que, durante un tiempo, fuese un jefe algo tóxico y controlador que, más que aportar cosas positivas a sus trabajadores, hacía que no hubiera un buen ambiente.

Con el tiempo, Gates aprendió sobre ello y se dio cuenta de que la paciencia era un punto clave para motivar tanto a sus compañeros como a sí mismo. Así, comenzó a priorizar conseguir buenos resultados antes que saber qué hacía cada empleado en cada momento. Aunque le costó aprender la lección, cree que esto fue una pieza imprescindible para tener buenos resultados, perseverando y sabiendo reconocer las oportunidades.

Además, el aumento de paciencia con sus trabajadores hizo que estos adoptasen una mejor percepción de Gates, lo que aumentaba su motivación y hacía que estos trabajasen mejor para no decepcionar a quien confiaba en ellos.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here