En su escritorio en la sede de Aston Martin en Silverstone, a escasos metros del legendario circuito de velocidad, descansa una copia impresa de las 114 páginas del reglamento deportivo de la Fórmula 1 2023. Es su libro de cabecera, su Biblia y su novela preferida. Sobre la superficie solo hay un objeto más, su ordenador. No necesita más. Es un hombre faro dentro de una escudería que sueña en grande y que está demostrando que los giros de guion en un deporte tan tecnológico como este son posibles. Y eso que hace 35 años, cuando dio sus primeros pasos como mecánico en la F3, dentro del embrión de la actual escudería, su primer jefe, Eddie Jordan, le dijo que duraría poco.
Andy Stevenson (Northampton, 1967) creció en una familia en la que nadie tenía nada que ver con el automovilismo deportivo, pero su padre era ingeniero y solía competir en mountain bike. Sus primeros contactos con el motorsport llegaron en su juventud a través de un amigo que corría en motocross y ahí empezó a hacer de las suyas al cambiar la disposición del tanque de combustible y el filtro de aire de su moto para mejorar la distribución del peso.
Aunque empezó a seguir la F1 con el título de campeón del mundo de James Hunt, ídolo de ídolos, no fue hasta que fue a ver una carrera que ese ambiente le enganchó irremediablemente. «Me parecía lo más emocionante del mundo; había aprensión, había recompensa, había fracaso, todas las emociones estaban ahí en un mismo lugar, y podías sentirlas», reconoce en una entrevista con Speedcafe.
Sus intereses en la adolescencia eran los viajes y la ingeniería -influencia paterna-, pero su primer objetivo era decantarse por estudiar Aeronáutica, hasta que un día un amigo le invitó a una carrera de Fórmula 3 en Thruxton (Inglaterra). Allí comenzó todo para él. Sería en ese equipo, Magnum Race Cars, donde daría sus primeros pasos montando los motores y preparando el coche para las carreras.
Fernando Alonso sale de su monoplaza en una carrera de la F1 2023. Aston Martin
«Tras hacer es visita y haber estado de alguna manera dentro del equipo, me dije ‘correcto, esto es; esta es la profesión que quiero’. Así que empecé a trabajar nada más acabar el colegio para Magnum Race Cars durante un año», recuerda. Durante esa temporada le presentaron a Eddie Jordan, que le contrató para su equipo de F3 de cara al año siguiente y le presionó desde el principio para sacar su mejor versión, llegando a decirle que no duraría mucho en el equipo.
«En ese momento era mucho más joven y no pude verlo, pero lo que Eddie estaba intentando hacer era motivarme. No es que no me quisiera en el equipo, quería que hiciera el doble de trabajado del que me estaba pagando. Y eso es lo que tuvo. Aunque para mí no era trabajado duro, estaba disfrutando lo que hacía», reconoció hace unos meses en la web oficial de Aston Martin.
Dos jugadas maestras
Su papel ahora es vital para un equipo que soñaba con plantarles cara a los grandes del Gran Circo en los próximos años y se ha encontrado con estar peleando por podios ya este 2023. Todo ello después de un proceso de evolución con escasos precedentes en la historia del deporte de una temporada a la siguiente. Él es el responsable de analizar cada decisión de los comisarios que pueda tener repercusiones en los resultados de Fernando Alonso y Lance Stroll. Y, en lo que va de año, ha ejecutado ya dos trucos de magia perfectos. No se le escapa una.
El primero de ellos, en el GP de Arabia Saudí. La FIA llegó a quitar el tercer puesto a Fernando Alonso, después de que revisaran en las últimas vueltas que la sanción por pisar las líneas de su casilla de salida no se había cumplido según lo establecido. ¿Por qué? Porque en las imágenes de TV parecía que el mecánico del gato trasero llegaba a tocar el monoplaza y existía un acuerdo entre los equipos por el que se aceptaba que «trabajar en el coche» implica tocar alguna parte del mismo.
Andy Stevenson, en el muro de boxes del equipo Aston Martin F1. Aston Martin
Pero Stevenson y su equipo tiraron de hemeroteca para presentar en tiempo récord otros siete casos similares en los que no había habido sanción por ello. Además, se agarraron a la redacción literal del reglamento y del supuesto acuerdo entre los equipos para convencer a los comisarios. Mantuvieron el podio 100º de la carrera deportiva de Alonso. Chapeau!
Y este domingo, en Austria, el director deportivo de Aston Martin volvió a hacer de las suyas. Una hora y media después de que acabase la carrera, donde Alonso cruzó la meta sexto y Stroll, 10º. Stevenson presentó una reclamación contra los resultados del evento. ¿El motivo? Se había dado cuenta de que varios pilotos habían infringido los límites de pista durante la carrera y no habían recibido las sanciones que establece el reglamento. A las 18.30 de la tarde entró en el despacho de los comisarios con un buen montón de folios.
«Cuando las cosas se ponen estresantes, es cuando yo me crezco»
Andy StevensonDirector deportivo de Aston Martin
Una hora y cuarto después, los comisarios aceptaron a trámite el recurso del británico y se dispusieron a analizar los «más de 1.200 casos» en entredicho. Finalmente, sancionaron a ocho pilotos y esto hizo ganar una posición a Alonso (5º) y otra a Stroll (9º). Puede saber a poco, pero son tres puntos que a final de temporada pueden ser decisivos en la batalla por el subcampeonato en la que está metido de lleno Aston Martin… y Fernando Alonso. Y en un fin de semana donde el AMR23 no pudo plantar cara de tú a tú a Red Bull ni a Ferrari.
Frases que definen a un auténtico ‘tiburón’
Su calidad, su profesionalidad, su competitividad y su obsesión por los matices, por no dejar ningún cabo suelto, ni siquiera cuando el Gran Circo de la F1 deja de girar, se define en varias frases.
«Las normas se actualizan cada año y tienes que estar al día para que cuando una decisión vaya en tu contra o detectes un error cometido por un rival, estés preparado para reaccionar».
«Cuando las cosas se ponen estresantes, es cuando yo me crezco. Esos momentos son difíciles, pero me van como anillo al dedo. Es entonces cuando puedo recurrir a todos mis conocimientos y experiencia. Puedes recurrir a las experiencias pasadas y a los precedentes que se han establecido. Fuera de temporada, no paro de ver repeticiones de carreras. Vuelvo loca a mi mujer, pero lo hago para recordar lo que ha pasado y los precedentes que se han establecido, para estar preparado para los momentos difíciles que inevitablemente tendremos que afrontar».
«La FIA nunca puede ganar»
Andy StevensonDirector deportivo de Aston Martin
«Hay que elegir las peleas. No puedes estar siempre en el oído de la FIA. Cuando se trata de algo bastante claro o de algo de lo que vas a salir ganando, entonces es cuando tienes que luchar».
«Nunca se puede recurrir una decisión por capricho. Si empiezas a poner el grito en el cielo, la FIA nunca te escuchará«.
«No sientes estrés cuando recibes satisfacción por todo lo que estás haciendo en tu trabajo. Eso es lo que me mantiene en marcha cada año y por lo que llevo aquí tanto tiempo. Cada temporada miras hacia delante y piensas en cómo pueden mejorar las cosas y cómo puedes contribuir a ello».
«La FIA nunca puede ganar. Cuando la carrera va bien es porque los demás han estado muy bien y cuando va mal es porque la FIA se ha equivocado. Lo siento por ellos, pero es normal, asumen esa responsabilidad y la gestionan muy bien».
«Tengo cuentas pendientes con este equipo. No estoy aquí para ganar unas cuantas carreras, ni tampoco los demás miembros del equipo. Estamos aquí para ganar el Campeonato del Mundo, ese es el objetivo a largo plazo. Hemos trabajado mucho para llegar hasta aquí, pero no podemos dormirnos en los laureles».
Sin duda, un activo indispensable para el presente y el futuro de Fernando Alonso y Aston Martin en la F1.
Fuente: relevo
